Como hace ya unos… ¡cuántos años! nuestros pequeños se han convertido en nuestros mayores. ¡Pronto darán el salto! Pasarán a la ESO.
La alegría y la nostalgia se entremezclan, pues los hemos visto crecer día a día.
Son un poquito míos y yo soy un poquito suya.
¿Cuántas horas habremos compartido? ¿Cuántos disgustillos? ¿Cuántas buenas noticias?
Ellos deben seguir su camino y nosotros continuar con esos otros pequeños que, como ellos, crecerán y sin darnos apenas cuenta, nos dirán adiós.
¿Qué sienten ellos?
Saben que es importante este cambio de etapa. Los nuevos profesores les infunden respeto.
Entienden que va a depender en gran parte de ellos que todo lo aprendido hasta ahora, en la Primaria, dé sus frutos.
Ahora hablan de responsabilidad, de madurez… ¿Sabrán bien lo que dicen?
Seguro.
“Tendremos que espabilarnos todos mucho y algunos madurar un poco”
Núria Garcia-Dotor
“La ESO será como una vuelta de hoja.
Es como una casa: Tienes que ir poniendo los ladrillos desde abajo. Si los pones mal, a la que subes un poco…”
Sergi Jiménez
“Yo espero subir las escaleras”
Cristina Abad
“Siempre he visto la ESO muy lejana y ahora, que está a la vuelta de la esquina, hace que me plantee algunas cosas, No es una sensación de miedo sino más bien de respeto.”
Alberta Pérez
“De sexto a ESO, yo creo que es un gran paso. En la ESO te hace falta mucha responsabilidad”
Iker Begiristain
“Te independizas del profesor”
Ona García
Per: Tere Valero
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